La insuficiencia respiratoria unida a las apneas del sueño en pacientes con obesidad, conocida como síndrome de Pickwick, es cada vez más frecuente como consecuencia de la epidemia de sobrepeso que sufre el mundo desarrollado. Un equipo de investigadores españoles acaba de demostrar que la ventilación no invasiva es el método más eficaz para mejorar los síntomas clínicos de los afectados por este síndrome.
En un estudio multicéntrico publicado en la revista American Journal of Respiratory and Critical Care Medicine, se ha comparado la eficacia de diferentes tratamientos: la ventilación no invasiva, la presión positiva continua en la vía aérea (CPAP) y un estilo de vida saludable que permita adelgazar. Además de demostrar que la ventilación no invasiva es la que mejores resultados ofrece, también han observado que la CPAP (que produce menor recuperación de la función respiratoria que la ventilación no invasiva) es también más efectiva en disminuir las apneas durante el sueño y los síntomas clinicos.
Este estudio, coordinado por el doctor Juan Fernando Masa desde el Hospital San Pedro de Alcántara de Cáceres, se ha realizado en el marco del Centro de Investigación Biomédica en Red de Enfermedades Respiratorias (CIBERES), dependiente del Instituto de Salud Carlos III, con la colaboración de 75 investigadores de 16 hospitales y una duración de cuatro años.
La insuficiencia respiratoria, frecuentemente unida a las apneas del sueño conformando el síndrome de Pickwick, produce un gran deterioro de la calidad de vida y un aumento de la mortalidad. Tiene su origen principalmente en la acumulación de grasa en el tórax y en el abdomen, que dificulta enormemente la respiración. Su tratamiento no está totalmente definido. La pérdida de peso era considerada el mejor tratamiento, pero es difícil de conseguir y mantener. También se ha propuesto la cirugía de estómago (gastroplastia), que tiene más riesgo en los pacientes con insuficiencia respiratoria. Otro tratamiento empleado es la mencionada ventilación no invasiva, una forma de ventilación artificiar similar a las que se utilizan en la UCI pero que no requiere anestesia ni la introducción invasiva de un tubo dentro de la tráquea. También se utiliza la CPAP, similar a la ventilación no invasiva pero más simple y económico.
"Debido al aumento de la obesidad y con ella de la insuficiencia respiratoria secundaria, esta patología es hoy muy frecuente y era preciso averiguar de forma contundente si el tratamiento con ventilación no invasiva es mejor que otros y se justifica así su uso extensivo a pesar de su elevado coste. Necesitábamos para esto un estudio que comparara diferentes tratamientos en un grupo muy numeroso de pacientes", explica el doctor Masa.
Este artículo forma parte del Proyecto Pickwick. El siguiente paso es comprobar si las conclusiones obtenidas tienen implicaciones relevantes para la práctica clínica. El estudio continuará tres años más para completar la segunda fase, que tiene como principal objetivo observar si la ventilación no invasiva disminuye los ingresos hospitalarios, los problemas cardiovasculares y la mortalidad. "Dado que no se había realizado un estudio de estas características en todo el mundo, existe una gran expectación internacional por los resultados", asegura Masa.
El estudio ha contado con la colaboración de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) y la empresa VitalAire. Han participado los siguientes hospitales: San Pedro de Alcántara (Cáceres), General Yagüe (Burgos), Arnau de Vilanova (Lleida), Txagorritxu (Vitoria), Valdecilla (Santander), Virgen del Rocío (Sevilla), La Paz (Madrid), Xeral-Calde (Lugo), 12 de Octubre (Madrid), Vall d'Hebron (Barcelona), Jiménez-Díaz (Madrid), Gregorio Marañón (Madrid), Miguel Servet (Zaragoza), Virgen de la Macarena (Sevilla), San Juan (Alicante) y Universitario Insular (Las Palmas).
Artículo:
Efficacy of Different Treatment Alternatives for Obesity Hypoventilation Syndrome. Pickwick Study.Juan F. Masa, Jaime Corral, María L. Alonso, Estrella Ordax, María F. Troncoso, Mónica González,Soledad López-Martínez, José M. Marín, Sergi Martí, Trinidad Díaz-Cambriles, Eusebi Chiner, Felipe Aizpuru and Carlos Egea; on behalf of the Spanish Sleep Network.American Journal of Respiratory and Critical Care Medicine.