De las 135 mujeres que fueron asesinadas por su pareja en España en los años 2010 y 2011, solo una de cada cuatro había denunciado previamente a su agresor. A partir de los datos de ese período, un estudio coordinado por investigadoras del CIBERESP concluye que no existe un menor riesgo de feminicidio entre las mujeres que denuncian la violencia machista. Se observa un fracaso en las medidas legales de protección.
En los años 2010 y 2011, el 54% de las mujeres asesinadas por su pareja en España que habían denunciado previamente a su agresor tenía una medida de protección penal vigente en el momento de su asesinato, y solo el 11,5% de las denunciantes se encontraba, según el protocolo de Valoración Policial de Riesgo, en una situación de riesgo alto o extremo. En el 46,1% de los casos se consideró bajo o inexistente.
“Este aspecto podría tener importantes implicaciones en la prevención del feminicidio, puesto que cada nivel de riesgo obtenido en dicho protocolo lleva implícitas unas medidas policiales de protección de obligado cumplimiento”, argumentan las tres autoras y el autor de este estudio publicado en la revista Gaceta Sanitaria.
La reforma para mejorar dicho protocolo, anunciada en 2014 por los Ministerios de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, y Justicia e Interior, todavía está pendiente de implementación
Esta radiografía del feminicidio, pionera en nuestro país, ha detectado también que las mujeres inmigrantes expuestas a la violencia de pareja presentan un riesgo cinco veces superior que las españolas de morir asesinadas. De los resultados del estudio también se deduce que las mujeres que sufren violencia de pareja y viven en un entorno rural tienen una probabilidad casi tres veces mayor de feminicidio que las que residen en zonas urbanas.
La edad media de las mujeres asesinadas durante el período de estudio, según los informes del Consejo General del Poder Judicial, fue de 41 años. La mayoría eran españolas (60,3%), seguidas por las procedentes de Ecuador (19,2%), Marruecos (17,3%) y Bolivia (9,6%). Las mujeres inmigrantes asesinadas eran mayoritariamente menores de 35 años (57,7%), mientras que entre las mujeres españolas asesinadas las menores de 35 años constituían un 25,4%.
De las 75 mujeres en las que se conoce la existencia o no de hijos menores de edad, 49 (65,3%) tenían hijos menores en el momento de su asesinato. Este porcentaje fue mayor en las mujeres inmigrantes (82,3%) que en las españolas (54,3%). Por otro lado, de las 98 mujeres asesinadas de las que pudo conocerse su situación de convivencia, el 63,3% convivía con su agresor en el momento del asesinato.
Este estudio ha sido coordinado por Carmen Vives Cases, investigadora del CIBERESP en la Universidad de Alicante, y la primera firmante es Belén Sanz Barbero, investigadora del CIBERESP en la Escuela Nacional de Sanidad del Instituto de Salud Carlos III.
Artículo de referencia:
Perfil sociodemográfico del feminicidio en España y su relación con las denuncias por violencia de pareja. Belén Sanz-Barbero, Julio Heras-Mosterio, Laura Otero-García, Carmen Vives-Cases. Gaceta Sanitaria