Científicos del CIBERONC pertenecientes a la Unidad de Oncología Molecular del CIEMAT y del Instituto de Investigación Biomédica del Hospital 12 de Octubre, en colaboración con personal de la Universidad de Santiago de Compostela y del Departamento de Terapias Innovadoras del sistema Hematopoyético del CIEMAT (perteneciente al CIBERER), demuestran el papel que ejerce la proteína IKKb, regulador del factor de transcripción NF-kB (un complejo proteico que controla la transcripción del ADN), en el cáncer de piel. Los resultados se han publicado en la revista Molecular Cancer Research, publicada por la Asociación Americana para la Investigación sobre el Cáncer (AACR, en sus siglas inglesas).
El cáncer es la consecuencia de un proceso de crecimiento incontrolado en las células del organismo, que escapan a los mecanismos habituales de control de la división celular. Se conocen dos grandes grupos de genes cuya alteración puede conducir al desarrollo de tumores: por una parte, los oncogenes (genes que causan tumores cuando las proteínas para las que codifican muestran una actividad incrementada respecto a la normal) y por otra, los genes supresores de tumores (que se caracterizan por causar tumores cuando sufren mutaciones inactivantes). El cáncer de piel no melanoma es el más abundante en la población caucásica y su tratamiento conlleva un importante coste económico y sanitario.
IKKb es una proteína con la capacidad de regular la actividad de otras muchas proteínas, importante en la regulación de la inflamación. Trabajos previos de este equipo y de otros habían determinado que IKKb favorece la aparición de tumores de hígado, mama, pulmón y epitelio oral, entre otros. Sin embargo, su rol en el desarrollo de tumores de piel era desconocido hasta el momento. El presente trabajo establece (de forma sorprendente, considerando el papel oncogénico de IKKb en el desarrollo de otros tumores) que IKKb actúa como una proteína supresora de tumores en la piel. IKKb causa en células de piel un aumento en la expresión de importantes proteínas supresoras de tumores, como p53, p16INK4A y p19ARF. "Nuestros trabajos indican que, para que la función protectora tumoral de IKKb en piel se manifieste, es necesaria la presencia de p16INK4A y p19ARF, pero p53 es prescindible", afirma Ángel Ramírez coordinador del estudio e investigador del CIBERONC.
"Estos resultados son importantes no sólo porque arrojan luz sobre el papel de IKKb en el cáncer de piel y por ser un ejemplo de cómo una proteína dada puede tener un efecto protector o desencadenante del cáncer dependiendo del contexto y tipo celular en el que se encuentre, sino también porque pone de manifiesto los riesgos que pueden tener los tratamientos para la inhibición de IKKb sobre la aparición de tumores de piel. Para conseguir este avance ha sido imprescindible el uso responsable y regulado de animales de experimentación" asegura el Dr. Ramírez
IKKβ-mediated Resistance to Skin Cancer Development is Ink4a/Arf-dependent. Page A, Bravo A, Suárez-Cabrera C, Alameda JP, Casanova ML, Lorz C, Segrelles C, Segovia JC, Paramio JM, Navarro M, Ramírez A. Mol Cancer Res. 2017 Jun 5. pii: molcanres.0157.2017. doi: 10.1158/1541-7786.MCR-17-0157